La palabra esperanza suele tener una connotación de futuro y a la vez, un tanto pasiva. Esperanza en el mañana, esperanza en el nuevo año que recién estrenamos. Esperanza en que las cosas mejorarán o cambiarán…
Proyectamos hacia el futuro lo que realmente anhelamos o necesitamos en el presente, tanto a nivel personal como global. Curiosamente, si buscamos la etimología de la palabra esperanza vemos que está compuesta por el verbo «esperar» más el sufijo «anza» que indica acción.
En inglés existe un tiempo verbal maravilloso, el presente continuo. No pretendo ahondar en los usos del presente continuo, que además probablemente ya conoces, pero sí me gustaría invitarte a visualizar:
¿Qué cambiaría si empezamos a construir nuestros pensamientos, nuestras conversaciones, nuestras ilusiones y anhelos en torno a la esperanza como si ya estuvieran ocurriendo en este momento?
¿Qué cambiaría si además nuestra construcción de esperanza, desde el yo y desde el nosotros, fuera un proceso constante e ininterrumpido?
Empezamos 2023 con esta invitación a la Esperanza, y a la Paz como acción y proceso creadores de realidad. Nos inspira la re-lectura del primer post que publicamos en el blog.
Aquel primer post trataba sobre el mensaje que la Dra. Poletti quiso transmitir a las enfermeras sobre ética y espiritualidad en el cuidado.
Hoy, catorce años después, las palabras de las Dra. Poletti siguen vivas no sólo para las enfermeras, sino para cualquier persona cuyos valores estén en sintonía con el respeto incondicional, la solidaridad, la reconciliación con la existencia y la esperanza.
La Esperanza como necesidad vital y como certeza vinculada al sentido de trascendencia, al perdón, a la capacidad de dar y recibir Amor, y a la belleza.
Elena Lorente Guerrero
8 de Enero de 2023

«La Esperanza no es la certeza de éxito, sino la certeza de que algo tiene sentido a pesar de lo que ocurra, y seguir adelante. Decir sí a lo que se nos presente. Ver un camino donde aún no existe. Ver la luz en la oscuridad». -ROSETTE POLETTI-
¡Qué bonita entrada!
Construir esperanza en presente continuo.
La esperanza es algo que se tiene, la esperanza es lo último que se pierde, ahí está… con este artículo, Elena, you are hoping us. Desde el presente continuo nos ayudas a tomar conciencia del verbo, de la acción, del construir desde el yo y el nosotros. A través de tus palabras «tú estás esperanzándonos» y te lo agradezco de corazón y mucho más en estos momentos en los que tantas y tantas fuerzas nos empujan a la desesperanza. Tus palabras son luz e inspiración y esencia, esencia del cuidado desde la primera palabra como podemos leer en tu primera publicación, de diciembre de 2009, sobre la conferencia de Poletti cuya cita que compartes en el post es, en estos momentos, un salvavidas, una oportunidad, esperanza para un barco que se hunde en la oscuridad.
Gracias!
JM
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Muchas gracias por tu comentario, José Manuel. Es precioso, reflexivo y poético. Un post en si mismo.
Me alegro de corazón que este primer escrito aporte luz e isnpiración. Nació del SER más que del yo.
Un abrazo,
E 🙂
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Tu entrada y ahora tu respuesta, al nombrar la poesía, han despertado en mi memoria el recuerdo de mi primer post que fue un poco eso, un intento de poesía 😂
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🙂 La poesía es uno de los lenguajes del Alma…
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